Siempre que empieza un nuevo año nos proponemos muchas cosas, algunas más realistas que otras, muchas veces queremos comernos el mundo de un solo bocado, y no basta con proponérnoslo tenemos que llevarlo a la acción.

Los gimnasios se llenan, la gente sale a correr o andar en bicicleta, y enero se convierte en el mes en el que todos quieren “ponerse a dieta”. Para evitar que solamente sea un mes al año el que dediques a cuidar tu salud tanto física como mental, no solamente plantees objetivos  a corto plazo, deberás llevarlos al largo plazo para que disfrutes de los beneficios que otorga el llevar un estilo de vida saludable.

Planea una rutina en la cual integres cada una de las comidas y una actividad física que permita el esparcimiento, lo ideal es realizar 5 comidas al día y evitar los periodos largos de ayuno. Al iniciar el año tenemos menos presiones en el trabajo o la escuela y es el mejor momento para establecer horarios y para elegir el ejercicio que más te guste.

Si crees que comiste demasiado pavo, relleno, bacalao, romeritos, pan, rosca de reyes, atoles, churros, tamales y demás, trata de mantener al menos de lunes a viernes una dieta rica en verduras y frutas, consume proteína a partir de fuentes con poca grasa como las carnes magras o las leguminosas y en mucho menor cantidad los alimentos del grupo de los cereales como el pan, las pastas, arroz y otras harinas.

Tener una dieta correcta no es difícil, así como tampoco lo es retomar hábitos saludables, lo difícil es decidir cuándo comenzar, ahora no hay pretextos, ya se partió la rosca de reyes, y se acabaron las vacaciones, pero lo más importante es que ya has decidido llevar una dieta saludable.

Puedes empezar con pequeños cambios, si eres de los que sufre por no poder comer muchas cosas, y prefieres comer de lo que te gusta aunque sea poquito, educa a tu fuerza de voluntad y come solamente pequeñas porciones, disfrútalas, saboréalas y sobre todo haz conciencia de cuánto has comido y si ya estás satisfecho.

En cambio si te es más fácil hacer cambios drásticos porque no puedes solo comer poquito, establece metas, tiempos límite y rétate a ti mismo a qué puedes mantener por un mayor tiempo un hábito o un estilo de vida saludable.

Una dieta saludable no basta si no se combina con una actividad física, ya que ésta te permitirá mejorar tu condición física, pero sobre todo a cuidar tu salud mental; el trabajo, el tráfico y la aglomeración de la gente tienden a crear cierto estrés en el día a día que puede uno liberar con tan solo caminar una vez al día.

Si todo lo anterior no te funciona, siempre queda la alternativa de ir con un especialista y darle un empujón a ese nuevo propósito, la mayoría de las veces recibirás la motivación que te hace falta para cumplir tus objetivos y la orientación necesaria para introducirte en un estilo de vida saludable.