Una vez más nuestro presidente envía un mensaje a los mexicanos ahora durante la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac). Desde unos meses atrás, al condonar la deuda a Cuba, bajo el discurso de que la relación bilateral con la isla es más importante que cualquier deuda, el presidente Enrique Peña Nieto ha estado enviando mensajes a los mexicanos y al mundo.

Claro está que cualquier mandatario debe asegurar buenas relaciones diplomáticas con cualquier estado, sea cual sea la situación política o económica del mismo. Pero el entrevistarse con Fidel Castro y tomarse una foto como si éste fuese un personaje a idolatrar se percibe como un muy mal mensaje que nada tienen que ver con las relaciones económicas o diplomáticas entre México y Cuba.

Más allá de que el PRI siempre se ha querido mover más hacia la izquierda, cayendo en un fatal populismo, nuestro presidente hoy posa con cara de admiración ante un dictador. Esta es una situación que a muchos mexicanos no nos ha agradado, ya que ¿cuál es realmente el mensaje entonces?  

¿Peña Nieto nos quiere mostrar lo ‘amigable’ que puede ser su gobierno? ¿o más bien nos quiere dejar claro que las tendencias de este sexenio serán de izquierda? ¿o que le interesa entablar relaciones con países de izquierda? ¿o simplemente nos quiere decir que la situación en Cuba y lo que experimenta su gente día a día no está en su agenda y la democracia no sirve de nada?

¿Cuál es la intención de fondo de restablecer nexos con Cuba y mejorar las relaciones con Venezuela, Argentina y Bolivia?