Muchos emprendedores sueñan con construir un negocio exitoso, pero la mayor parte de las veces dejan de lado un aspecto esencial del cual depende la subsistencia del mismo; y es el de contratar una póliza de seguro, que cubra los gastos originados por eventualidades o pérdidas a las que de alguna manera estará expuesto.

Tener un seguro significa estar preparados para cualquier imprevisto que pueda generar  problemas financieros a tu comercio, negocio o microempresa. Nunca se sabe cuándo se necesitaría de un respaldo económico, y es por eso que siempre, en cualquier proyecto comercial se debe contemplar la contratación de un seguro que proteja el capital invertido en un negocio.

Los riesgos a los que se exponen muchas empresas van desde sufrir algún robo, algún daño en las instalaciones, algún incidente con los clientes o trabajadores, incendio, etc. Todos ellos se constituyen en eventos fortuitos o aislados que amenazan el éxito de la empresa, y que pueden tener como consecuencia, en el peor de los escenarios, la quiebra del negocio.

Ten en cuenta que siempre existirán  situaciones que se escapan de tu control y que pueden poner en peligro tu patrimonio y esfuerzo. La buena noticia es que el contratiempo de los eventos desafortunados puede ser solucionado o reducido gracias a la contratación de una póliza de seguro, que debe ser visto como una inversión o ahorro que garantizará tu estabilidad y tranquilidad.

Algunos de los beneficios de contratar un seguro son:

• Estar protegido ante un robo. El contar con una alarma es una forma de asegurar y estar precavido y es alerta rápida para la policía, pero no alcanza para proteger tus bienes. Con un seguro estarás resguardado y podrás ajustar la suma asegurada dependiendo de tu equipamiento. De esta manera podrás solventar las pérdidas y reponer los bienes robados.  
• Estar protegido ante un incendio. Los gastos que implica una pérdida por incendio son elevados, excediendo lo invertido. Un seguro te respalda y evita que tu negocio sufra pérdida total.
• Resguardar los cristales. Muchos de los negocios cuentan con ventanales o vidriería cuyos vidrios son propensos a quebrarse o rajarse en cualquier ocasión. Por ellos los seguros de negocios incluyen esta protección.
• Salvaguardar lo que tengas en la caja fuerte. Los bienes más importantes los tienes guardados en la caja fuerte no es suficiente en caso de robo. Con un seguro puedes estar protegido en este punto en específico.
• Contar con servicios de asistencia. No solo podemos pensar en robos o incendios, también hay que pensar que puede haber un problema en plomería, gas o cerrajería. Si cuentas con este tipo de cobertura puedes contar con prestadores que te solucionen la urgencia.
• Incluyen protección por daños a terceros. Puede ser que en tu negocio circule muchas personas y un accidente puede provocar que un cliente salga dañado. Por eso debemos  contar con un seguro de Responsabilidad Civil.
• Puedes armar la protección según tus necesidades. Los seguros de comercio te permiten incluir coberturas adicionales de esta forma podemos adecuar la protección de los bienes que quieres resguardar o los riesgos que están expuestos.
• Ganas en costo-beneficio. Si llegas a sacar cálculos de los gastos que podrías tener por un incendio o robo y lo comparas con la inversión que harás al contar con un seguro, te darás cuenta que contar con la cobertura es siempre una buena alternativa.

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