¿Alguna vez has escuchado las palabras dolor de espalda, sobrepeso u obesidad en la misma oración? O te has cuestionado la relación que existe entre estos fenómenos.

Si tu respuesta fue afirmativa, en este blog trataremos de explicar que es lo que une a esta serie de palabras, y la razón por la que es verdaderamente importante encontrarte en un rango de peso saludable al padecer dolor de espalda.

En la actualidad existe una relación ya documentada y directa entre el exceso de peso y la aparición y aumento del dolor de espalda baja o dolor lumbar, siendo asimismo un factor de riesgo modificable para el padecimiento de hernias de disco.

La presencia de dolor lumbar es en parte explicada por la tensión biomecánica y el incremento de la carga comprensiva sobre la columna vertebral donde el exceso de peso aumenta la carga sobre el disco intervertebral acelerando así su desgaste e incrementando el riesgo a que este se rompa. 

¿Y qué es lo que ocurre en nuestro país?

La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018 (ENSANUT 2018) determinó que en México el 75.2% de los adultos mayores de 20 años tienen sobrepeso u obesidad, lo que hace que 7 de cada 10 mexicanos este propensos a presentar dolor de espalda baja en cualquier momento de su vida.

Pero ¿cómo podemos determinar si alguien padece sobrepeso u obesidad?

El índice de masa corporal (IMC) es un indicador del peso relativo, utilizado internacionalmente para el diagnóstico del estado nutricio de un individuo. Se calcula dividiendo el peso en kilogramos entre el cuadrado de la estatura en metros. A partir del resultado de dicha ecuación se puede clasificar a un individuo con bajo peso, peso normal, sobrepeso u obesidad.

Por lo anterior, para que cualquier individuo se considere con sobrepeso el IMC debe encontrarse en un rango de 25 a 29.9 kg/m2. Mientras que al hablar de obesidad el IMC es ? 30.

En este sentido, al encontrar una relación causal entre el dolor de espalda baja o dolor lumbar y el exceso de peso el Centro de la Columna Vertebral comprometido con la búsqueda de mejorar la calidad de vida y la sintomatología de cada paciente incluye consultas nutricionales en su tratamiento, con el objetivo de brindarle a cada paciente una asesoría personalizada y un acompañamiento continuo en la pérdida progresiva de peso a través de la adquisición de hábitos saludables de alimentación.

En nuestro próximo blog hablaremos de la importancia de una buena rehabilitación en padecimientos de columna vertebral.