Sasha, una joven madre inglesa vive con su hija pequeña en una comunidad de cara al océano, cuya paz
se altera hitchcockianamente con la irrupción de Tatiana, una excursionista de antecedentes brumosos
que instala su tienda de campaña en el patio de la propiedad de Sasha. Se establece una amistad no
exenta de una palpable carga erótica que redundará en el crimen y la suplantación.
Opinión
Mirando al mar. - "Si el cine de François Ozon siempre me ha gustado creo que es porque prefiere
subordinar el texto hablado al poder de las imágenes. Por eso en sus películas los personajes no
hablan demasiado, no se explican a sí mismos a base de palabras, sino mediante un encuadre concreto,
una composi ...
más»
Mirando al mar. - "Si el cine de François Ozon siempre me ha gustado creo que es porque prefiere
subordinar el texto hablado al poder de las imágenes. Por eso en sus películas los personajes no
hablan demasiado, no se explican a sí mismos a base de palabras, sino mediante un encuadre concreto,
una composición del plano insólita, un sutil desplazamiento de la cámara cargado de intención. No
son sus frases las que los definen, sino sus acciones. Su cine es francés en esencia, pero difiere
(y eso es lo que me llama la atención) del resto en su apuesta por las imágenes puras como
principales portadoras de sentido, al contrario que las otras, tan dadas a la verborrea y el diálogo
constante como motor de la narración.
Las películas de Ozon (especialmente las de su primera etapa, como es el caso) son también
provocadoras, rezuman erotismo y mala baba, poesía impregnada de bilis (muy influida por el
surrealismo y la obra de Buñuel). Y son siempre perturbadoras, protagonizadas por personajes
complejos, turbios en sus intenciones, que suelen cambiar (para descubrir su verdadera piel) cuando
un hecho inesperado ?en forma de individuo misterioso, por lo general- se cuela en sus vidas, tal
como ocurría en Gotas de agua sobre piedras calientes, Amantes criminales o Swimming pool.
Bien, pues de todo esto hay en el primerizo mediometraje del autor galo, una enigmática incursión en
el cine de suspense que es freudiana en su concepción (esa necesidad de maternidad reñida con el
dolor físico que conlleva) y muy decadente en su resolución visual, plagada de apuntes eróticos
malignos que dejan en cueros los extraños anhelos de sus dos protagonistas, una encantadora Sasha
Hails y una desconcertante Marina de Van, que repetiría con Ozon en su siguiente juguete siniestro,
Sitcom. El resultado final es puro magnetismo visual, tan estimulante que hasta se le perdona ese
deseo de epatar por epatar (tan propio de la juventud) que se le intuye en muchos momentos". Autor
(a): Nachete de Málaga, España. menos«
Título original
Regarde La Mer
Próximo estreno: 30 de
Actúan
Sasha Hails, Marina de Van, Samantha, Paul Raoux
Próximo estreno: 30 de
Califícame: