MEDIO AMBIENTE Y ARQUITECTURA:

El acero inoxidable es un material muy utilizado en la cocina por su resistencia a la corrosión, al calor y a las manchas. Sin embargo, es inevitable que con el uso llegue a sufrir ciertos daños. Existen productos comerciales en el mercado que ayudan a mantener su brillo superficial y quitan manchas n profundas, sin embargo, para usos más "rudos" se han creado polvos pasivantes, pulidores y decapantes que van más allá de la superficie y logran recuperar la belleza y función del acero. Lo que nunca debes olvidar es el uso de detergentes abrasivos o que contengan cloro ya que esto podría dañar irreparablemente tus utensilios o electrodomésticos. De igual manera no utilices fibras metálicas o ásperas que provocarían también un gran daño. Recuerda siempre que la mejor limpieza es con agua, detergente suave y una esponja; enjuagar abundantemente y secar con un trapo limpio. Esto además debe ser de manera frecuente para evitar que la grasa o manchas se peguen.

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