• El uso de paneles solares es una inversión a largo plazo que retribuye en beneficios económicos en los primeros seis o siete años de uso. 

David Antonio Olmos Vázquez, egresado de la Licenciatura en Ingeniería Mecatrónica de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) y dedicado a la asesoría y soporte técnico en el área de la fotovoltaica, afirma que el uso de paneles solares va en aumento en México tanto para espacios residenciales como comerciales, destacando así la importancia del uso de fuentes de energía más sustentables como “una alternativa o apoyo para una cultura más verde”.   

En el caso de México, explicó el egresado UDLAP, los usuarios interesados en este tipo de energía deben tener en cuenta ciertos temas. Por un lado, se trata de una inversión a largo plazo que puede oscilar según las demandas del usuario, entre 20 mil y 100 mil pesos, por lo que recordó que se debe tener en cuenta que la instalación fotovoltaica tiene un periodo de vida de aproximadamente 20 años y que los beneficios de manera económica “vienen a partir de los seis o siete años”. Reconoció que este tipo de energía necesita una instalación de energía eléctrica como la que provee la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por lo que la forma en que se retribuye esta inversión se ve reflejado en el pago del servicio a dicha empresa “prácticamente le vendes la energía que tú produces, es decir, la CFE te va a no cobrar o pagar esta energía dependiendo el caso”. 

Por otro lado, resaltó que al tratarse de una inversión a largo plazo se deben tener en cuenta los estándares de calidad de los productos y las políticas de instalación que proveen las empresas dedicadas a esta industria y no solo la oferta más económica del mercado.  Los inversores y paneles solares necesarios deben ser equipos de “muy buena calidad, que estén avalados por determinados organismos a nivel internacional y nacional”, que tengan por ejemplo protección contra incendios. Finalmente, el egresado UDLAP recomendó que, no solo en lo que se refiere a instalaciones fotovoltaicas, sino en general, los usuarios deben “siempre informarse y tratar de saber qué [es lo que están empleando]. Nuestro peor enemigo es el desconocimiento y la ignorancia, muchas veces por querer tener una solución barata contratamos un proyecto que no nos va a dar un beneficio”.   David Antonio Olmos Vázquez, quien labora en la empresa Fronius en la matriz localizada en Austria, explicó que la energía fotovoltaica se obtiene a partir de los paneles solares, los cuales captan la energía del sol y la transforman en energía consumible, a través de un inversor como los que diseña la empresa Fronius.