Sobre el bastón blanco, entrevista con Lourdes Castro de Topos Femenil. 

Mi nombre es Lourdes Castro y soy una persona ciega de nacimiento.
Hoy que es día del bastón blanco, me gustaría decir que mi experiencia utilizándolo ha sido muy grata, ya que, desde el momento en que comencé a usarlo al entrar a la secundaria, me volví más independiente; realizaba mis cambios de clase sola, y en general me desplazaba a donde yo necesitaba. Y aún cuando actualmente no me desplazo sola en las calles, me sigue sirviendo de un gran apoyo incluso cuando alguna persona me va guiando; ya que, con el bastón voy ubicando cualquier otro obstáculo que pueda haber a mi paso, en caso de que a mi acompañante pudiese pasársele avisarme sobre algo que se encuentra en mi camino.

Sin embargo, en ocasiones ha sido un poco frustrante el ir caminando sola por las calles, ya que aún con la ayuda de mi bastón me he topado con algunas complicaciones. Como lo son las banquetas en tan mal estado que se encuentran en nuestra Ciudad de Puebla, cuando realizaba mis cambios de aula en la universidad, debido a que estas se encontraban en diversos edificios.

De igual forma tuve que enfrentarme a algunas malas experiencias al tomar mis clases de orientación y movilidad en la Ciudad de México, como parte de mi rehabilitación integral, ya que era sumamente retador el tratar de encontrar un camino libre y seguro al tratar de desplazarme por la acera, debido a la gran cantidad de puestos ambulantes que estaban dispuestos de forma desordenada sobre la mayoría de las banquetas, ya que, no era posible para nosotros las personas con discapacidad visual caminar en una línea recta, debido a estos obstáculos que encontrábamos en el camino.
La importancia del bastón blanco radica en que gracias a él las personas con discapacidad visual podemos desplazarnos completamente solos, ya que es una herramienta que, siendo utilizada correctamente por nosotros, nos ayuda a ubicar cualquier obstáculo que se encuentre frente a nosotros, incluso las irregularidades del terreno sobre el que vayamos transitando.

Lo que creo que todas las personas deberían saber, es que de acuerdo a su distintivo por el color, el bastón blanco corresponde a las personas completamente ciegas; y que una práctica que en ocasiones realizan de forma errónea al tratar de ayudarnos, es tomar nuestro bastón, incluso cuando ven que nosotros lo vamos sujetando, y lo levantan cuando ven que este va a pasar sobre algún terreno irregular o topará con algún obstáculo, lo cual precisamente es la función de este instrumento, ayudarnos a percatarnos de estas situaciones, por lo cual, todo el tiempo debe ir deslizándose sobre el suelo y debe ser el usuario de este quien en todo momento lo vaya manejando, para cerciorarse de que va cubriendo totalmente su frente de hombro a hombro.