Perro si come perro.

Y para muestra unos botones:

"La gente buena no se tatúa”  lema de la más nueva e infortunada campaña del gobierno municipal de Aguascalientes. La campaña fue lanzada a la par de unos lineamientos en los cuales autos con vidrios polarizados o placas de otros estados pueden ser detenidos, la primera me parece lógica, la segunda absurda ¿que van a hacer cuando sea la feria de San Marcos? ¿Van a detener a todos los autos foráneos? Pero encima la idea de criminalizar a las personas tatuadas viola las garantías individuales que aparecen en la constitución, además supongo que le pedirán a todos los delincuentes que se tatúen para poder identificarlos y así tener éxito en su campaña.

Otro botón:

La bonita gente que, sin necesitarlo, se estaciona en los lugares para discapacitados ¿Qué se requiere para que entiendan que esos lugares están reservados para quien los NECESITA y no para quien los QUIERE? En diversas ocasiones he platicado con empleados de plazas como Triángulo o Via San Angel quienes me dicen que no pueden reportarlos pero en la SSTP dicen que si se puede a petición de la plaza… supongo que entonces les da miedo perder a este tipo de clientes sin darse cuenta de la mala imagen que generan.

Tercer botón:

El programa Monitor Vial… muy bien planeado, toman la lectura, la foto y la suben a internet para que puedas revisar en la página, ahí mismo hay una liga para que puedas pagar la multa y ya quedó arreglado, de primer mundo. ¿Pero que pasa si caes en un bache, zanja, cráter o cenote que cunden las calles de Puebla? No hay cámara, ni foto, ni policía, ni oficina ni nadie que te ayude ¿Por qué no hay una página donde puedas poner tu foto, el dirección de bache y tus datos para que te paguen la reparación? Digo, si de tener cosas de primer mundo se trata pues hay que ser parejos.

De tantos botones esto parece rosal en primavera. 

Sobre este tema recomiendo la película:

CIUDAD DE DIOS.

Calificada con la mejor película brasileña de todos los tiempos (IMDb) trata sobre la pauperización progresiva de las ciudades brasileñas, la caída de los valores tradicionales y el surgimiento de un corrosivo resentimiento social.

La dirección de Fernando Meirelles es excelente y las actuaciones son destacables. Esta película forma parte de un grupo de grandes películas brasileñas como Carandiru o Estación Central que lograron que el mundo volteara la mirada al cine del país sudamericano.

Les dos trailer de Ciudad de Dios:

En español: