La circuncisión es un procedimiento quirúrgico que consiste en la eliminación del prepucio, la piel que cubre la cabeza del pene. Aunque es común en muchas culturas y religiones, también tiene implicaciones médicas que vale la pena considerar.

Ventajas higiénicas:
Al retirar el prepucio, se facilita la limpieza del glande, reduciendo la acumulación de esmegma (una sustancia blanca compuesta por células muertas y secreciones) y con ello el riesgo de infecciones como la balanitis. También puede disminuir la incidencia de infecciones del tracto urinario, sobre todo en niños.

Beneficios funcionales y médicos:
Algunos estudios sugieren que la circuncisión puede reducir el riesgo de transmisión de infecciones de transmisión sexual (ITS), incluido el VIH. En hombres con fimosis (incapacidad para retraer el prepucio), parafimosis o infecciones recurrentes, la circuncisión suele ser el tratamiento definitivo.

Desventajas y consideraciones:
Aunque el procedimiento es generalmente seguro, toda cirugía implica riesgos como sangrado, infección o sensibilidad alterada. Algunos hombres refieren disminución en la sensibilidad del glande, aunque esto no siempre afecta negativamente la función sexual.

La circuncisión puede ofrecer beneficios específicos en higiene y salud, especialmente cuando está médicamente indicada. No obstante, no es una necesidad para todos, y su decisión debe tomarse de forma informada, considerando tanto factores médicos como personales o culturales.

Si tienes dudas o presentas molestias relacionadas con el prepucio, lo ideal es consultar con un especialista en urología.

Dra. Alba Nidia Utrera Acosta