El desprendimiento de retina es una afección ocular seria que requiere atención médica inmediata. La retina es una fina capa de tejido sensible a la luz en la parte posterior del ojo. Su función es convertir la luz en señales que el cerebro interpreta como imágenes.

Cuando la retina se desprende, se separa de su posición normal, lo que puede provocar pérdida de visión si no se trata rápidamente.

En la Unidad de Oftalmología Puebla, nos especializamos en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades de la retina, utilizando tecnología avanzada y técnicas quirúrgicas de vanguardia.

Causas del Desprendimiento de Retina
El desprendimiento de retina puede ocurrir por varias razones:

• Desprendimiento Regmatógeno: Es el tipo más común y ocurre cuando se forman desgarros o agujeros en la retina. El humor vítreo, una sustancia gelatinosa dentro del ojo, puede pasar a través del desgarro y acumularse debajo de la retina, separándola de la capa subyacente.
• Desprendimiento Traccional: Suele ocurrir en personas con diabetes avanzada. El tejido cicatricial en la superficie de la retina tira de ella y la separa del fondo del ojo.
• Desprendimiento Exudativo: Se debe a la acumulación de líquido debajo de la retina, sin desgarros ni tracciones. Puede estar asociado a condiciones inflamatorias o tumorales.

Factores de Riesgo

Algunos factores que pueden aumentar el riesgo de desprendimiento de retina incluyen:

• Historia familiar de desprendimiento de retina.
• Miopía severa.
• Cirugías oculares previas.
• Lesiones oculares.
• Enfermedades como la diabetes.
• Síntomas de Alerta

Es crucial reconocer los síntomas del desprendimiento de retina para buscar atención médica de inmediato. Algunos de los signos de alerta incluyen:

• Aparición repentina de destellos de luz (fotopsias).
• Un incremento en la cantidad de "moscas volantes" (miodesopsias).
• Sensación de una sombra o cortina que cubre parte del campo visual.
• Disminución repentina de la visión.
• Diagnóstico y Tratamiento

En la Unidad de Oftalmología Puebla, utilizamos una combinación de técnicas para diagnosticar el desprendimiento de retina, incluyendo:

Examen de fondo de ojo: Permite visualizar el interior del ojo y detectar desgarros o desprendimientos.
Ecografía ocular: Utilizada cuando hay opacidades en el vítreo que dificultan la visualización directa de la retina.

Opciones de Tratamiento
El tratamiento del desprendimiento de retina depende del tipo, la gravedad y la localización del desprendimiento. Las opciones incluyen:

Fotocoagulación con láser: Utiliza un láser para crear pequeñas quemaduras alrededor del desgarro retinal, formando cicatrices que sellan el desgarro.
Crioterapia: Congela el área alrededor del desgarro retinal para ayudar a formar una cicatriz que sujete la retina en su lugar.
Retinopexia neumática: Se inyecta una burbuja de gas en el ojo para empujar la retina contra la pared ocular, seguida de láser o crioterapia.
Vitrectomía: Se elimina el humor vítreo y se sustituye por una solución salina, gas o aceite de silicona, permitiendo que la retina se vuelva a colocar en su lugar.
Escleral buckle (cerclaje escleral): Se coloca una banda de silicona alrededor del ojo para empujar la pared ocular hacia la retina desprendida.

Prevención y Cuidados Postoperatorios
La prevención de un desprendimiento de retina no siempre es posible, pero algunas medidas pueden ayudar a reducir el riesgo:

• Realizar exámenes oftalmológicos regulares, especialmente si se tienen factores de riesgo.
• Proteger los ojos de lesiones.
• Controlar enfermedades subyacentes como la diabetes.
• Después del tratamiento, es fundamental seguir las indicaciones médicas y asistir a todas las citas de seguimiento. En algunos casos, pueden ser necesarias restricciones temporales en actividades físicas para asegurar una recuperación óptima.