En el complejo mundo de la salud mental, hay interacciones fascinantes y a menudo poco comprendidas del daño que se vive por algunas situaciones. Uno de los vínculos más intrigantes es el que existe entre el daño cerebral y las adicciones.

El cerebro es el órgano maestro del cuerpo, es vulnerable a lesiones que pueden surgir de diversas fuentes, como traumatismos, accidentes cerebrovasculares o enfermedades. Estas lesiones pueden afectar áreas clave del cerebro relacionadas con la toma de decisiones, el control de impulsos y la gestión de emociones, creando un terreno propicio para el desarrollo de adicciones, no olvidando que un consumidor mete veneno y/o sustancias dañinas al metabolismo de las personas.

Cuando el cerebro sufre una lesión, a veces ocasionada por los procesos metabolicos que se viven al consumir adicciones, el paciente puede experimentan dificultades en la autorregulación y en la evaluación de riesgos, malas deciciones, insatisfaccion, etc. Y estas situaciones se observan con cambios estructurales en el volumen de áreas corticales especificas.

Algunas ideas de los motivos por los que se observan estos daños son los siguientes:

• Neurotoxicidad: las drogas pueden tener propiedades tóxicas, lo que significa que pueden causar daño directo a las células nerviosas. Esto se ha observado en estudios con animales y humanos.
• Sobreactivacion del sistema nervioso: Las drogas aumentan la liberación de neurotransmisores, especialmente de dopamina, norepinefrina y serotonina. Esto puede llevar a una sobreactivación del sistema nervioso central, que puede tener consecuencias negativas para las células nerviosas.
• Estrés oxidativo: El estrés oxidativo ocurre cuando hay un desequilibrio entre la producción de especies reactivas de oxígeno (radicales libres) y la capacidad del cuerpo para neutralizarlos. El estrés oxidativo puede dañar las células y contribuir al envejecimiento celular, lo que contribuye a los efectos en la conducta y el comportamiento.

Es importante destacar que la magnitud del daño cerebral puede depender de varios factores, incluyendo la dosis, la frecuencia de uso, la duración del uso y la susceptibilidad individual. Además, la recuperación del cerebro puede ser posible después de suspender el uso de anfetaminas, pero en algunos casos, los efectos a largo plazo pueden persistir. El abuso de sustancias, en general, puede tener consecuencias graves para la salud y se recomienda buscar ayuda médica si se sospecha de un problema de abuso de sustancias.

En Nueva Mañana, tratamiento especializado contra las adicciones, contamos con pruebas psicologicas y fisiologicas para conocer el daño que tiene puede tener el paciente como la prueba de Electroencefalograma con mapeo cerebral.