De visita en la Toscana para promocionar su último libro que reflexiona sobre las estrechas
relaciones entre el original y la copia en el arte, el escritor inglés James Miller se entrevista
con una bella mujer de origen francés, dueña de una galería de arte. Ambos partirán por algunas
horas a un pequeño pueblo cerca de Florencia, donde al menos en apariencia, interpretarán los roles
de un viejo matrimonio. Abbas Kiarostami aborda de manera brillante el fenómeno de la réplica en
esta lograda cinta, aclamada por la crítica internacional.
Opinión
Película fascinante, poliédrica y compleja donde las haya, "Copia certificada". - "Pero
también exigente, árida, paralela casi a nuestra manera de entender una historia de amor y el cine
en general. Aviso para navegantes: la última cita con Kiarostami se revela como su película más
cercana, la ...
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Película fascinante, poliédrica y compleja donde las haya, "Copia certificada". - "Pero
también exigente, árida, paralela casi a nuestra manera de entender una historia de amor y el cine
en general. Aviso para navegantes: la última cita con Kiarostami se revela como su película más
cercana, la primera que rueda en Europa y con un reparto europeo, la primera que orbita sobre una
pareja. Pero también puede considerarse de sus más herméticas y radicalmente autorales.
Por lo menos de todas las que se han estrenado comercialmente. Consideremos "Close-Up", "¿Dónde está
la casa de mi amigo?", "Y la vida continúa", "A través de los olivos", "El sabor de las cerezas y
"El viento nos llevará" y dejemos fuera sus experimentos más límite (e interesantes), como "Ten" o
"Five". Extremo experimental que quizá podría conectarse con las de más allá a través de "Copia
certificada".
A poco que uno quiera, por supuesto, "Copia certificada" se convertirá en un apasionante juego
narrativo, una historia de desesperanza y una nutritiva reflexión sobre el arte, todo a la vez, pero
todo por separado.
Prende la mecha Kiarostami presentando a una madre soltera a quien llamaremos "Ella" (Juliette
Binoche, inmensa es quedarse corto) que entabla relación con James Miller (William Shimell) un
escritor centrado en el estudio de la semiótica del arte. Especialmente en la representación de la
realidad y la validez de la copia. Con lo que el director abona su terreno para una primera parte
centrada justo en eso: en el arte y su lenguaje, su función, sus cualidades intrínsecas y justo lo
contrario, sus atributos artificiales.
Haciendo uso de una densa retórica, el director va desgranando la materia para construir un
impresionante discurso basado en la creación y la autoría, en la realidad y la representación de la
misma. En la realidad y la interpretación de la misma. Y en la legitimidad de esas representación e
interpretación. Se trata de un discurso complejo, matizado y de vocación casi intelectual. Un
cuestionamiento de la legitimidad antropológica de "lo original" frente a la copia y una serie de
dudas relacionadas con la representación de la realidad y de cómo esta es en sí misma "una copia":
un cuadro que imita a otro cuadro (o sea, una falsificación) no tiene por qué ser menos legítimo que
ese cuadro original (que, al fin y al cabo, no deja de ser una falsificación... de la realidad).
Suma y sigue. La copia puede llegar a ser más bella que el original. La simplificación puede ser más
pura que el referente complejo por el simple hecho de ser más simple. El placer y el disfrute
hedonista no tiene por qué condenarse frente a la "virtud" del sacrificio.
La belleza puede ser fugaz; la felicidad eterna, falaz.
¿La belleza se encuentra en la obra de arte, en la mente del autor o en la mirada del espectador?
Una serie de disquisiciones más propias del estudio de la estética y la Historia del arte que pueden
espantar a más de uno y que relegarían directamente a Kiarostami al ámbito museístico en el que,
francamente, se encuentra cómodo. No habría sido raro ver algunas de las reflexiones de "Copia
certificada" en aquella exposición que se organizó en el CCCB de Barcelona a propósito de su
relación por carta con Víctor Erice ("Correspondències").
Pero el director tiene mucho más que decir cuando se revela que no todo es tan (ejem) lineal como se
muestra. Mediante una secuencia de palpitante misterio narrativo en una cafetería, la historia da
una especie de vuelta, y lo que hasta ahora había sido una pareja en "formación" de repente, sin que
nos demos cuenta, ha pasado a ser una "en descomposición".
Se crea una especie de desdoblamiento, y ahora Ella y James llevan 15 años juntos. No sabemos qué ha
pasado exactamente, si hasta el momento hemos sido testigos de un flashback, o si esta es otra
pareja, o si de repente se nos abre ante los ojos una realidad alternativa. Probablemente no lo sepa
ni el propio director.
Pero sí sabemos una cosa: esos 15 años han supuesto el desgaste y el desencanto absoluto de la
pareja, que se ha convertido en una especie de doppelgänger de sí misma, una copia de la original
que, ya os decía, se presenta tan válida como la otra. ¿Más? Sea como sea, ese tiempo pasado ha ido
desgastando lo que en un principio era pasión, y ahora esto no parece poder arreglarlo ni siquiera
unos pendientes y unos labios pintados de rojo sexo.
Las posibilidades son infinitas (si de repente el director desdobla la película es porque le da la
gana... ¿y por qué no puede desdoblarla de nuevo a voluntad en un bucle infinito?) y la ficción se
alimenta de sí misma. El juego de espejos está servido. Incluso literalmente: hay en "Copia
certificada" espejos por todas partes. Algunos están en plano, otros en off. Algunos simplemente dan
un reflejo, otros capturan dentro a sus protagonistas -ese reflejo de Ella en un espejo en medio de
un almacén de obras de arte que convierte a la mujer... en una propia pieza artística-. E incluso la
planificación juega a ello: el director tira del plano-contraplano frontal. Se crea con ello un
efecto de reflejo entre los protagonistas y de paso se establece un diálogo entre ellos y el
espectador, cuando lo miran frente a frente.
En lo que en el fondo no deja de ser una constante en Kiarostami. Esta investigación del lenguaje,
la temática de la copia y la representación de la realidad ya se situaba en el centro temático de "Y
la vida continúa", y encontraba una vuelta de tuerca en "A través de los olivos", por ejemplo.
Pero no es el único lugar reconocible en "Copia certificada". Aunque el contexto es distinto, a
nivel formal podría uno cambiar los paisajes de la Toscana por el polvo del camino iraní y obtener
una secuencia en coche muy similar a las vistas anteriormente. El coche se convierte en una especie
de lugar íntimo donde el drama silencioso encuentra un lugar destacado. Muy recomendable, a
propósito, el visionado de "Ten", una película que dice en voz baja bastante más sobre la mujer
musulmana que algunos otros ejemplos mucho más berreantes.
En cualquier caso, "Copia certificada" termina siendo un intenso viaje de pareja madura (se la ha
comparado razonablemente con el "Te querré siempre" de Rossellini) explicado desde la más
insobornable personalidad. Empezando por la expresión más honesta y sincera a través de diálogos de
contenido denso, enfocados hacia el discurso analítico; diálogos severos y deliberadamente forzados
que deben buscar su compensación en una parte formal austera y desnuda. Pero que luego el giro lo
lleva todo al terreno del dolor, el gesto expresivo y el derrumbe emocional.
Una película audaz, arriesgada, difícil y que -peaje- podría resultar pedante a más de uno. Pero por
Dios, no dejéis que los árboles os impidan ver el bosque." - Autor(a): John "Bluto"
Blutarsky para lacasadeloshorrores.com menos«
Título original
Copie Conforme
Próximo estreno: 30 de
País
Francia, Irán, Italia
Actúan
Juliette Binoche, William Shimell, Jean-Claude Carrière, Agathe Natanson, Gianna Giachetti
Director
Abbas Kiarostami
Próximo estreno: 30 de
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