Las escuelas de negocios del mundo están de cabeza adecuando el material de sus maestrías en administración de empresas, MBA (Master in Business Administration). ¿La razón? La revolucionaria idea del "Lean Startup" que vino a dar al traste de forma contundente con lo que siempre habían enseñado para hacer un nuevo negocio: escribir un plan de negocio. 

El error de escribir planes de negocio

A todos nos enseñaron que para iniciar un negocio lo mejor era escribir un detallado plan de negocio antes de iniciarlo. En ello podrías invertir varias semanas detallando tu idea, tu competencia, el equipo que formarías, tu marca, la forma de vender, el crecimiento y porcentaje del mercado que cubrirías al año, dos años, tu punto de equilibrio, etc. 

¿Cuál es el problema? Que mucho de lo que se escribe en el plan de negocios son meras suposiciones, sobretodo la parte de crecimiento en ventas... Además te tardas mucho en pulir y pulir el plan, luego en desarrollar el producto o servicio y finalmente sales al mercado para ¡toparte con la realidad! 

A los clientes no les gusta el producto, no les parecen tus precios y en un 75% o más de casos el depuradísimo plan de negocio ¡acaba en la quiebra!

¿Qué propone "Lean Startup?

El movimiento LEAN (libre de grasa) inició en Toyota pero fue Eric Ries con su magnífico libro Lean Startup que aterrizó el tema hace pocos años transformando la forma de hacer nuevos negocios. Lean Startup propone que debes salir cuanto antes al mercado a validar si tu idea de negocio es viable. Para ello hay que entender tres conceptos del modelo Lean Startup... 

1. Salto de rana o "Leap of faith". 

Todo negocio surge de una idea que suponemos le gustará al mercado. Dicha idea es una hipótesis o suposición que esperamos sea cierta... A eso le llamamos salto de rana o "leap of faith", pues es por el momento una hipótesis NO comprobada hasta que nuestro producto o servicio esté en el marcado. 

2. Producto mínimo viable o MVP

Por naturaleza el creador del negocio está enamorado de su idea y le gusta pulirla y pulirla y agregarle más características y depurarla y seguirle agregando nuevas características... ¡antes de mostrarla a los clientes! Para ello pasa semanas, meses o incluso años afinando su producto o servicio, creando la empresa, haciendo la marca, contratando locales, personal, etc. Sólo hasta que tiene algo ya muy depurado entonces ¡sale al mercado y su idea muchas veces no jala!

Lo que propone Lean Startup es hacer el producto o servicio más elemental que contenga la esencia básica, a eso le llama "minimum viable product" o MVP. Dicho MVP no debe depurarse y depurarse, ni se le deben agregar características innecesarias. 

Lo crucial es sacar un MVP cuanto antes al mundo real y ver cómo lo acepta el mercado. ¡Hay que fallar o tener éxito rápido! Ello sólo se logra evitando meses o años de desarrollo en productos o servicios que no han sido probados cuanto antes en el mercado. 

3. Pivotear

Una vez que se ha lanzado un producto mínimo al mercado su aceptación o no determina su viabilidad. Si el producto es aceptado se va puliendo, sino se modifica (pivoteando hacia una nueva variante) y se saca nuevamente otro MVP y se valida en el mercado... Este proceso de ir pivoteando permite apuntar y afinar nuevas características según su aceptación al salir al mercado... Este proceso ágil de liberación frecuente de productos pivote al mercado permite ir afinando la oferta aprendiendo de lo que demanda el consumidor incrementando las probabilidades de éxito. 

¿Quieres ver ejemplos de productos mínimos viables? 

Así como hay youtube para videos o linkedin para organigramas empresariales, Kickstarter, Indiegogo o Fondeadora (primera plataforma en México) son plataformas a donde la gente sube un MVP (un prototipo básico o un video de la idea) y el propio mercado decide aportar recursos para crear el producto o servicio. Las mejores ideas de negocio ahora sólo se desarrollan si el mercado las acepta.

Fascinante, ¿no lo crees?