Ernesto Aroche Aguilar*

@earoche

El pasado 11 de noviembre el columnista Valentín Varillas daba a conocer que un hacker o grupo de hacker que firman sus mensajes a la manera tradicional de Anonymous, anunciaron que harían públicas las facturas de los helicópteros Agusta que compró el gobierno del estado y que ha mantenido lejos del escrutinio público. Para darle credibilidad al anuncio el grupo subió junto con el mensaje un archivo de Excel que contiene un supuesto Estado Presupuestal de la Secretaría General de Gobierno.

Una semana después, varios medios impresos y digitales retomaron la información que publicó Varillas en el portal Status y replicaron el mensaje del hacker, en ese inter los responsables de vulnerar la seguridad del portal de gobierno publicaron dos mensajes para responderle a Marcelo García Almaguer, el responsable de todo el aparato de comunicación del gobierno del estado.

De acuerdo con los comunicados, García Almaguer puso en duda la capacidad de intrusión del hacker o hackers (aunque no está claro en donde se hizo esa declaración), por lo que en respuesta subieron a pastebin.com –un sitio que nació como espacio para comunicación entre programadores y que ahora es utilizado por una red mucho mas amplia que incluye a hackers, crackers y demás fauna tecnológica— capturas de pantalla de la intrusión al sistema de compras gubernamental, y al sistema de declaración patrimonial, de donde extrajeron personales del funcionario morenovallista.

En un segundo mensaje subieron copia digital de la factura de una Jeep Patriot 2014 que fue adquirida el 11 de septiembre pasado con un costo de 238 mil pesos.

Tras conocerse la nota de manera masiva, es decir luego de que fue replicada por varios impresos y medios digitales, los mensajes albergados en el sitio pastebin.com, y algunas fotos de las capturas desparecieron de la red (fueron removidos entre las 4 am y las 10:00 am del jueves 21).

De acuerdo con algunos expertos en la red si bien es posible solicitar como afectado de la intrusión que la información se baje de los servidores, especialmente por que parte de la información contiene datos personales, se trata de un proceso que lleva varios días, a veces semanas, por lo que la primera hipótesis es que el mismo que subió la información fue quién días después la desapareció de la red.

Ahora ¿estuvo Anonymous detrás de los mensajes y los documentos oficiales que se subieron a la red?

Ellos, o al menos desde la cuenta adjudicada a una de las tantas células y ramificaciones que tiene el grupo, dicen que no.

Especialistas consultados reconocen que si bien quien penetró el sistema gubernamental maneja un términos que hacen pensar en alguien con conocimientos de programación, no implica que se trate de gente vinculada al grupo hacker, y que cualquiera puede replicar la firma distintiva del grupo.

Entonces, ¿quién sacó los datos personales de García Almaguer y la factura de la Patriot? La respuesta habría que buscarla tal  vez al interior del propio gobierno. Alguien con conocimientos técnicos e interés en la transparencia, o alguien que quiere cobrarle afrentas al funcionario. Cualquiera que sea la razón, ojalá cumpla (o cumplan) y haga públicas las facturas de los helicópteros Agusta.

Que lástima que sea esta la ruta ha seguir para conocer que es lo que hacen los gobernantes con los recursos públicos pues la ruta institucional la tienen pervertidas quienes ejercen el poder (otorgado por los ciudadanos), especialmente el poder estatal.

*Director del portal Lado B