Antecedentes

El trabajo de un docente universitario no se limita a la impartición de clases, cursos o asesoría de tesis. La docencia es una de las cuatro áreas en que un profesor universitario (sea éste licenciado, maestro o doctor) debe trabajar en cualquier universidad del país. De acuerdo con las necesidades y reglamentos que provienen de diversos organismos, un profesor debe desempeñarse como docente, investigador, tutor y gestor. Esto, sin embargo, es imperante para quienes cuentan con un posgrado y medio tiempo o tiempo completo.

Las formas en cómo tales actividades se desarrollan dependen en gran medida de las diferentes disciplinas: sociales, científicas, salud, humanísticas, administrativas, entre otras. En el caso de la música, los parámetros suelen ser completamente distintos y contrastantes a las ciencias. De tal suerte, la investigación obedece a especialidades como la composición, etno/musicología, interpretación de un instrumento y educación, fundamentalmente. Los grupos académicos de profesores que se forman a partir de tales especialidades conllevan a la generación de proyectos que dan por resultado un producto académico y artístico al mismo tiempo. La participación de alumnos universitarios es, evidentemente, de suma importancia, pues ello forma parte del desarrollo y formación integral del estudiante, de su currículo y experiencia.

Advertencia

Un ejemplo de tales actividades es un próximo fonograma con la música del compositor Gonzalo Macías, profesor de composición de la Facultad de Artes. El CD estará disponible a partir de este año (2015). Gracias a la invitación del compositor, el escritor de este texto ha participado como redactor de las notas del CD. En el mismo, participan reconocidos intérpretes, así como alumnos y otros profesores de la Facultad de Artes-BUAP. De aquí precisamente la advertencia, pues los párrafos que a continuación se podrán leer se basan en las notas del CD, y que a su vez parten de ideas propias del compositor. Aquí se podrán desarrollar con más amplitud algunas de las ideas que para las notas del CD quedaron abreviadas.

//youtu.be/gWJlKbWeekU

CD

Este tipo de producciones académicas y artísticas se realizan bajo el concurso y gestión de apoyos, para lo cual se somete al dictamen de una comisión integrada por pares. El término “pares” se refiere a profesores o académicos que se desempeñan en áreas o disciplinas similares. Este CD se integra con dos piezas para instrumentos solistas y tres obras electroacústicas. Las primeras datan de la década de 1990, mientras que las otras son de creación más reciente. Una producción de tal naturaleza implica un logro en el sentido que la música artística no cuenta con los mismos mecanismos de la música comercial, donde una compañía productora se encarga sobre todo de la venta y distribución del material. Por la longitud del texto, éste se ha dividido en dos partes deliberadamente, siguiendo la distribución propuesta aquí, y no la del CD.

Caída (1992; 6’40’’)

El concepto de algo que se mueve por acción de su propio peso se puede traducir de múltiples maneras, ya sea en sentido real o figurado. En cualquier acepción, la idea es susceptible de representarse en la música. Caída (1992), para piano, es un ejemplo claro de tal expresión. La composición parte de dos elementos: 1) una nota aguda que se repite constantemente, y 2) un arpegio descendente, que a lo largo de la obra ocupará de manera gradual una gran parte de la extensión del teclado del piano. Así, dado el creciente aumento en el uso del registro pianístico, la obra se puede entender como una representación de la obsesión en términos musicales. La obra es interpretada por el propio compositor.

Sinn (1999; 10’03’’)

La repetición y la dificultad técnica se conjugan para generar el discurso musical de esta pieza para guitarra. El intérprete de la grabación es el mismo guitarrista para quien fue dedicada: Juan Carlos Laguna. El uso de la notación común a través de pentagramas se combina con nueva grafía. Esto permite al compositor construir segmentos de música, o motivos, que deben repetirse el número de veces indicado en la partitura. Cada repetición es diferente. ¿Qué se modifica en el elemento repetitivo, qué lo varía? Precisamente, la dificultad provoca pequeños “accidentes” sonoros, que al ocurrir de forma constante producen variantes. En la partitura se indica una afinación diferente a la convencional, donde las cuerdas centrales deben afinarse “un poco más abajo que su altura normal”.