¿Te imaginas dejar todo lo que conoces, cargar a tus hijos, y empezar a caminar, con la certeza de que lo que encuentres no puede ser peor que lo que dejas?

El pueblo de Honduras está en crisis humanitaria desde hace varios años: muerte, hambre, maras, narcotráfico, pandillas, peligro e inseguridad. Si estas personas no salen de su país lo más probable es que acaben muertas. La gente en Honduras se está sucumbiendo, tiene una de las tasa de homicidios más alta del mundo,  en las noches se escuchan las balas como fuegos pirotécnicos,  los niños esquivan los cadáveres como si fueran piedras, ¿Se han puesto a pensar qué le espera a un pueblo con futuras generaciones donde el 40% de la población es menor a los 15 años,  acostumbrados a este escenario?

Viví en Honduras por casi 4 años, es un lugar hermoso lastimado por la  terrible situación de inseguridad, sí mucho más que en México. La situación que vive la gente de ahí es más grave de lo que se ve. Recuerdo que la señora que me ayudaba en la limpieza dela casa, en el transcurso de 2 meses, recibió 3 llamadas diciéndole que habían matado a su cuñado, a los 15 días otra llamada donde le comunicaban que habían matado a su hermano y una tercera 20 días después diciéndole que habían matado a su padre, ¿Imaginan el rencor, dolor y desgracia con el que van a crecer los hijos de estas personas? ¿No  harían todo lo posible por salir y sobrevivir?

La gente está  huyendo de su país, no por gusto, si no por sobrevivencia,  miles de niños, mujeres y hombres intenta cruzar la frontera huyendo de las condiciones en las que se encuentran. Se está acabando con la ESPERANZA de un país entero. Tengamos CARIDAD HUMANA, EMPATÍA, RESPETO Y AMOR POR EL PRÓJIMO, POR NUESTROS HERMANOS CENTROAMERICANOS. HOY POR TI, MAÑANA POR MI.

Sé que es una situación compleja. Cada país tiene sus leyes y su prioridad son sus ciudadanos, pero no podemos cerrar los ojos e ignorar lo que está pasando en los países vecinos, que nos guste o no, tarde o temprano nos afectará. Ignoro cual sea la solución correcta, más si sé que el primer paso es profundizar un poco más sobre las causas de esta migración. ¿Se imaginan dejar todo lo que conoces, poner todas tus pertenencias en una mochila, tomar la mano de tus hijos e irte a lo desconocido? Con la única seguridad de que lo que venga por delante no puede ser peor que lo que se está dejando atrás.

Difundamos y ayudemos a nuestros hermanos hondureños que viven desde hace mucho tiempo una situación complicada, no los juzguen, ni les teman. Investiguemos en que podemos apoyar, cualquier pequeña acción que hagamos desde nuestra trinchera, puede tener un gran impacto. No olvidemos que este calvario, es el mismo que sufren nuestros paisanos cuando se van a los Estados Unidos.

“De nada sirve sentir angustia si nos quedamos como simples espectadores”

Adriana Castro