El gremio alrededor de las graduaciones escolares se sumó a la lista de víctimas por parte del coronavirus, pues la suspensión del ciclo escolar en Puebla provocó que todos los eventos que había programados y que se veían como una bocanada de oxígeno en esta crisis económica simplemente se perdieran sin posibilidad de recuperarlos.

Los negocios más afectados son las denominadas “banqueteras”, que se dedican a la organización de eventos sociales y que en esta temporada veían ingresos extras debido a las fiestas de fin de curso escolar, que este año se suspendieron sin ningún tipo de celebración a causa del Covid-19.

Alejandro Montiel Casas se dedica desde hace casi 20 años a la organización de este tipo de eventos a través de su negocio “Banquetes Casas” y durante las últimas semanas tuvo que cancelar entre 15 y 20 eventos relacionados con graduaciones, debido a la restricción de hacer este tipo de eventos masivos.

“Nos llegaban eventos de 80 a 120 personas, sí nos bajó bastante por lo mismo de la contingencia ya que no se pueden hacer reuniones de más de 20 o 25 personas, entonces todos los eventos que ya teníamos programados en cuanto a graduaciones se cancelaron, por lo mismo de que no hay graduaciones”.

Por cada evento de graduación que no organizó Alejandro, alrededor de 25 y 30 personas perdieron su fuente de ingresos, entre meseros, lavalozas y galopinas, sin contar a todos los proveedores que hay alrededor de estas celebraciones como músicos, fotógrafos, pasteleros, etcétera.

“No nada más afecta a la banquetera, también afecta a todo el personal porque contamos con meseros, con galopinas, con lavalozas y si nosotros no tenemos eventos, obviamente ellos tampoco tienen trabajo y no tienen un ingreso”.

AFECTACIÓN EN TODOS LOS EVENTOS

Para Abraham Campos, propietario de “Banquetes Campbell”, la cancelación de graduaciones no le afectó tanto porque solo tenía dos programadas que se perdieron, pues era en estas fechas cuando se hacía el trabajo para gestionar y vender los eventos a las escuelas, pero afirmó que el impacto económico va más allá ya que el Covid-19 arrasó con los ingresos que generaba cualquier tipo de evento social.

“De graduaciones apenas empezaba yo a hacer gestión, únicamente tenía dos que me cancelaron y no se reprogramaron porque también es una tediosidad porque ahí no entra un solo anfitrión, entran los padres de familia y unos opinan una cosa, otros opinan otra, a veces llega el día de la graduación y la gente todavía tiene adeudos”.

Son eventos como bodas, bautizos o 15 años los que más pérdida generan y al mismo tiempo los que más riesgo sanitario provocan, pues son los que concentran la mayor cantidad de gente y puede haber hasta más de mil personas en un mismo lugar.

Abraham consideró que la forma de hacer fiestas en un futuro va a cambiar y los lugares que antes se usaban para eventos de 500 personas, ahora solo podrán albergar a 300 para garantizar una sana distancia en la medida de los posible.

MÚSICA SE APAGA

Las personas dedicadas al mundo del entretenimiento y música en eventos sociales es otro de los sectores afectados en esta temporada de graduaciones, pues la suspensión de estos eventos también los dejó afectados económicamente.

Milton es un DJ que lleva música a las fiestas y lo complementa con servicios de fotografía y video desde hace más de 10 años, pero debido a la contingencia este año tendrá que esperar hasta que las autoridades otorguen luz verde para reactivar este tipo de reuniones masivas.

“Esta cuarentena nos ha venido a dar en la torre a todos nosotros, a todo el gremio que se dedica a eventos sociales, a servicios, no solo hemos visto la baja, sino la cancelación de eventos que ya teníamos contratados”.

Reconoció que, en la lista de actividades, el mundo del entretenimiento y convivencia social será el último en regresar a la normalidad, mientras ese día llega, Milton estira el dinero para sobrevivir al mismo tiempo que ve cómo sus colegas y amigos abandonan el negocio.