Como sabemos, ninguno de nosotros está exento de ser afectados debido a la humedad, pues son detalles que surgen a medida que el tiempo pasa y no lo detectamos hasta que el problema haya avanzado o comenzamos a notar goteras. En época de lluvias sobre todo, es normal encontrarse con malos olores o abultamientos en la pintura, por ello a continuación te enlistamos los tipos de humedad más comunes:

1.- Humedad por capilaridad: Se presenta con mayor frecuencia en sótanos, plantas bajas o pisos de viviendas, formadas a partir del agua que asciende del terreno que está en contacto con la construcción, este tipo de humedad se manifiesta con manchas oscuras, eflorescencias de color blanco, pintura abombada e incluso una degradación de la estructura afectada.

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2.- Humedad por condensación: Es común que se presente cuando las construcciones son muy frías o hay un exceso de humedad en el ambiente, es decir, hay más vapor de agua de lo que la vivienda puede soportar convirtiéndose en agua, impregnándose en las paredes, produciendo moho; una manera de detectarla es con la presencia de pequeñas gotas en paredes y ventanas, con efecto de lagrimeo o empañado.

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3.- Humedad por filtración: Ocurre cuando el agua accede a través de grietas o fisuras que haya del exterior hacia el interior y se puede detectar a través de manchas con un centro y línea de contorno, se produce a consecuencia de una mala impermeabilización o bien por tuberías y desagües rotos, o grifos abiertos.

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