Todos hemos pasado por algún momento de apuro en cuanto a deuda financiera se refiere, el estrés que provoca el no saber cómo liquidarla con velocidad es proporcional a la preocupación que originan los recibos que van llegando mes con mes. Para estos momentos de pánico, te traemos unos útiles consejo que te pueden funcionar:

Aumenta tu confianza. Es el primer paso para tu recuperación financiera, puedes trabajar de freelance, buscar otro empleo a medio tiempo o fines de semana. El objetivo es que crees tus propias fuentes de ingreso, incluso un voluntariado puede abrirte las puertas a un trabajo bien remunerado.

Lleva las cuentas de todo. Controla tus gastos, tienes que ir monitoreando a detalle cómo realizas tus pagos. De esta forma podrás detectar los gastos innecesarios que van mermando tu economía, es decir, evitarás el tan temido gasto hormiga.

Asesórate con profesionales. Aquí entramos nosotros, te asesoramos en cada momento, pensando siempre en cuál es la mejor opción para tu situación y tus planes a futuro. Te ayudamos a crear una estrategia personalizada que te haga crecer de acuerdo a tus posibilidades. Nuestros contadores están capacitados para guiarte en finanzas personales y profesionales.

Una de las grandes claves para el éxito financiero es la planificación y el ahorro, evita las compras a plazos largos (18, 24, 30 meses) que al final terminarás pagando mucho más en relación al precio de contado.

De igual forma, ahorrar, aunque sea un poco cada quince días o cada mes te permitirá tener una cantidad de respaldo ante cualquier eventualidad. Si tienes dudas al respecto puedes consultar a cualquier miembro de nuestro equipo para que te asesore.

Fuente: Artículo publicado en El Economista el 21 de noviembre de 2016 por Rodrigo Riquelme.