Como padre o madre, y como alguien que alguna vez estudio, o sigue haciéndolo, seguramente te habrás planteado la siguiente pregunta: ¿Por qué a algunos niños se les da mejor los deportes, a otros las matemáticas y a otros pintar, leer o tocar un instrumento? La respuesta parece sencilla y llena de sentido: porque cada niño tiene sus propias motivaciones y talentos, que desarrolla a su ritmo y de manera diferente a los demás.

A esta conclusión llega el neuropsicólogo y educador de la Universidad de Harvard, Howard Gardner, quien sostiene que cada niño evoluciona con sus propias necesidades. Así, un niño que no muestre inquietud por el lenguaje, por ejemplo, podría tener una gran habilidad en el campo de las matemáticas y la inteligencia espacial.

Es importante que sepas que existen, en total, 8 tipos de inteligencias que los niños desarrollan desde pequeños. La inteligencia lógico-matemática, Inteligencia lingüística, la Inteligencia Espacial, Inteligencia musical, Inteligencia Kinestésico corporal, Inteligencia intrapersonal, Inteligencia Interpersonal, y la inteligencia naturalista.

Ahora, no existe una única manera que los maestros usen para enseñar a sus estudiantes. Sin embargo, algunas estrategias están respaldadas por estudios de investigación y son más eficaces que otras.

Estos enfoques y técnicas pueden beneficiar a todos los estudiantes, pero son especialmente beneficiosas para los niños que piensan y aprenden de manera diferente, y que posean alguna de todas las diferencias del aprendizaje que conforman el espectro de la inteligencia humana: Cuando se usan correctamente, yo hago, nosotros hacemos, tú haces, puede beneficiar a todos los estudiantes. Eso se debe a que el maestro puede brindar apoyo durante cada fase. Sin embargo, los maestros deben conocer qué apoyo ofrecer. También necesitan saber cuándo los estudiantes entienden un concepto lo suficiente para trabajar ellos solos. Piensa en esto como montar en bicicleta: el maestro necesita saber cuándo retirar las ruedas de apoyo.

A continuación, te brindamos 6 estrategias, avaladas por Jane Ossen Foss, reconocida educadora , maestra y teórica estadounidense,  que los maestros usan para que todos sus alumnos aprendan, sin importar a que tipo de inteligencia pertenecen, o que dificultades del aprendizaje presenten.

1. Dar el ejemplo

La mayoría de los niños no aprenden simplemente con decirles lo que tienen que hacer. Los maestros usan una estrategia llamada “yo hago, nosotros hacemos, tú haces” para enseñar una habilidad. El maestro mostrará cómo hacer algo (“yo hago”), como resolver un problema de matemáticas. Después, invitará a los niños a hacer un problema con él (“nosotros hacemos”). Después los niños intentarán resolver un problema de matemáticas ellos solos (“tú haces”).

2. Tiempo de espera

El “tiempo de espera” (o “tiempo para pensar”) es una pausa de tres a siete segundos después de que el maestro ha dicho o preguntado algo. En lugar de nombrar al primer estudiante que levanta la mano, el maestro se detendrá y esperará.

3. Enseñanza multisensorial

La enseñanza multisensorial es un tipo de instrucción que involucra más de un sentido a la vez. Un maestro podría ayudar a los niños a aprender información con apoyo del tacto, el movimiento, la vista y el oído.

4. Organizadores gráficos

Los organizadores gráficos son herramientas visuales. Muestran información o la conexión entre ideas. También ayudan a que los niños organicen lo que han aprendido o lo que tienen que hacer. Los maestros usan estas herramientas como un “andamiaje” o para dar apoyo alrededor del proceso de aprendizaje de los estudiantes con problemas (es la misma idea que cuando los albañiles colocan andamios para poder construir un edificio).

Existen muchos tipos diferentes de organizadores gráficos, como los diagramas de Venn y los diagramas de flujo.

5. Enseñanza individual y en grupos pequeños

Una estrategia que los maestros usan es modificar el tamaño del grupo al que enseñan. Algunas lecciones se enseñan a toda la clase. Otras es mejor enseñarlas en pequeños grupos de estudiantes o a un solo estudiante. Aprender en un grupo pequeño o uno-a-uno puede ser muy beneficioso para los niños que piensan ya prenden de manera diferente.

En el Colegio Le Bret, estamos seguros que los niños que cursan preescolar y primaria en la actualidad, es probable que estudien una carrera universitaria que aún no existe.