Para cualquier tipo de aire acondicionado al igual que muchos otros electrodomésticos del hogar, requieren de un mantenimiento preventivo cada determinado tiempo para asegurar su correcto funcionamiento. Las altas temperaturas son cada vez más intensas y se prevé que gracias al calentamiento global todo empeore, por lo que es importante estar seguros de que nuestro aire acondicionado esté funcionando de la mejor manera para enfrentar estas situaciones.

Se debe tomar en consideración que durante toda su vida útil es más que aconsejable efectuar un mantenimiento cada cierto tiempo, de esta manera será fundamental para mantener y extender la vida de nuestro aire acondicionado, garantizar su rendimiento y evitar la aparición de posibles averías.

El tiempo recomendado en que se debe hacer un mantenimiento a un aire acondicionado es de aproximadamente cada 6 meses o al menos una vez al año, todo va a depender de su uso y las condiciones climáticas en las que se encuentre la unidad interior del equipo, ya que en este espacio hay un filtro que sirve para mejorar la calidad del aire que luego se respira. Esta es una tarea muy importante ya que, de no hacerla, pueden generarse graves problemas de salud.

Para realizar esta limpieza es importante contar con la ayuda de expertos porque, muchas veces, el trabajo se complica por la disposición del equipo en balcones o espacios de difícil acceso.  Cuando se nota alguna deficiencia en los equipos de aire acondicionado, como ruidos, malos olores o una bajada en la potencia de los mismos, serán los filtros del Split lo primero a revisar por el técnico.

Un aire acondicionado está compuesto por filtros y serpentines que acumulan hongos y bacterias que se encuentran en el aire y estas so absorbidas por el equipo, por lo consiguiente, si no se les da la limpieza adecuada, pueden generar alergias o problemas respiratorios a las personas que están en el espacio donde se ubica el equipo.

Sin el mantenimiento adecuado se pueden generar olores desagradables, puede reducir su capacidad de enfriamiento, lo que ocasiona que se utilice más energía eléctrica y se generen más gastos. Para resumir, si no se le da mantenimiento al equipo se gastará más en la reparación de algunas de sus piezas, en el excesivo cobro del recibo de luz o en cuidar y recuperar la salud de las personas afectadas.