El pie equino varo es un defecto congénito frecuente y por lo general es un problema aislado para un recién nacido saludable en los demás aspectos.

Diágnostico

En la mayoría de los casos, puede ser posible detectarlo desde la ecografía con bastante claridad antes del nacimiento del bebé; de no ser así, el médico reconoce este defecto poco tiempo después del nacimiento, simplemente observando las formas y el posicionamiento del pie, del recién nacido.

Generalmente puede ser corregido por un médico experto sin cirugía, aunque a veces los niños pueden llegar a necesitar una cirugía de seguimiento más adelante.

Tratamiento

Lo más recomendable es empezar el tratamiento unos días después del nacimiento, colocando unos yesos correctivos ya que cuando el niño es pequeño sus huesos cuentan con mucha plasticidad lo que por ende aumenta su capacidad de remodelación, por lo que tras la colocación de los yesos desde los primero días de vida se aplicaría una corrección progresiva, manera en la cúal los niños pueden llegar a obtener un pie completamente normal.

El tratamiento, realizado por el doctor Abel Ortíz Domínguez ayuda a mejorar la alineación en lo mayor posible y mantener esta corrección completa, brindando así resultados en los que los niños pueden realizar todo tipo de actividades físicas sin cojera ni discapacidad.