Se trata de un material de lo más versátil: lo encontramos en pisos, muros, encimeras e incluso aplicado en mobiliario, y es que además de ser precioso es prácticamente eterno… aunque no por eso deja de requerir de ciertos cuidados, especialmente para evitar que se manche.

Algunos concejos que hay que tomar en cuenta son: 

• Recuerda que solo debes pasarle un paño o el trapeador. Si está muy sucio, entonces usa un cepillo, pero que sea de cerdas suaves.
• Para limpiar pisos de mármol trapéalos con esta solución: a una cubeta (de tamaño regular) de agua agrega 1/2 taza de vinagre blanco. ¿Está muy sucio? También puedes disolver una pequeña cantidad de jabón líquido en agua tibia. En ambos casos no olvides secar: el mármol húmedo puede desarrollar hongos  que terminarán manchándolo.
• Para eliminar manchas de moho, humedad u óxido: frota medio limón sobre la mancha. Cuando la elimines, pasa la solución de agua con vinagre y después seca.
• Las manchas de vino y café se pueden quitar con una mezcla de tres cucharadas de bórax en un vaso de agua. Aplica con el cepillo de cerdas suaves y después limpia con agua jabonosa. No olvides secar.
• Para sacar brillo a las superficies de mármol, por ejemplo una encimera, vierte un puñado de sal y frota con un paño húmedo. Aclara con un paño humedo y seca.
• El mármol es un material poroso por lo que puede absorber líquidos que lo pueden manchar. Así, considera ponerle, especialmente a los pisos, una capa de cera.

Estos son alguno de los consejos que Mezher te ofece para que tu marmol siempre luzca como nuevo.